El horizonte de sucesos es el espacio de no retorno en el área de influencia de un agujero negro. A partir de ahí no hay posibilidad de escapar a la gravedad masiva que todo lo engulle. Ni siquiera la luz puede hacerlo. Algo similar viene ocurriendo con los agujeros negros de la desinformación que acaban por atrapar verdades como puños para desintegrarlas y hacer imposible su recomposición. Agujeros formados por la acumulación masiva de intereses alineados en la construcción de mundos paralelos basados en falacias. Pero para que esos interesen prosperen y su capacidad destructiva sea realmente eficaz es imprescindible la legión de transmisores que, voluntaria o involuntariamente, replican los mensajes y argumentos falsarios. Antes de compartir, piénsatelo. Enrique Dans, Los tortuosos caminos de la desinformación: "La tecnología siempre ha tenido una característica: hace descender rápidamente las barreras de entrada a su uso. Las mismas técnicas de gestión de microinfluencers utilizadas durante años, ahora se aplican a la difusión de campañas de desinformación. Ahora, simplemente, muchos de los que participan en ellas creen que están salvando el mundo y difundiendo ideas que todos sus amigos deberían conocer, cuando en realidad son simplemente el tonto que no cobra. Cuando reenvíes mensajes, plantéate si de verdad sabes lo que estás reenviando, si lo has podido verificar de manera fehaciente dejando al margen tus sesgos personales, y sobre todo, si realmente vale la pena."
Event Horizon Telescope. Black hole - Messier 87. Wikimedia Commons. Consulta: 16.07.2021. <https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Black_hole_-_Messier_87.jpg>. Compartido con licencia CC BY 4.0 |