Publicado en Mediterráneo en 4 de septiembre de 2010
Castellón ocupaba en el 2007 el número 30 entre las 50 provincias españolas en nivel de desarrollo, según el estudio Desarrollo humano en España 1980-2007 realizado por el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) y publicado por la Obra Social de Bancaja el pasado mes de julio. El trabajo, realizado por los catedráticos Carmen Herrero y Antonio Villar y el investigador Ángel Soler, nos proporciona una excelente radiografía del grado real de desarrollo de nuestra sociedad a nivel nacional, autonómico y provincial.
El Índice de Desarrollo Humano (IDH) es el barómetro establecido por Naciones Unidas a partir de 1990 para comparar la evolución del desarrollo de todos los países y regiones del mundo. Tomando como base esencial diversos indicadores de salud, educación y bienestar material, el IDH intenta ponderar no tanto lo conseguido hasta el momento, como las capacidades de cada territorio para construir su futuro.
España, situada entre Austria y Dinamarca, ocupa el puesto 15 en el ranking mundial que encabezan Noruega y Australia y que integran 182 países. Por su parte, la Comunitat Valenciana se sitúa en el undécimo lugar entre las 17 comunidades autónomas españolas, precedida de Galicia y seguida de Baleares. La provincia de Castellón, como ya he indicado más arriba, se ubica en la zona media-baja del índice de desarrollo provincial español, en un espacio en el que nos enmarcan Pontevedra y Lugo por arriba y Baleares y Cuenca por abajo.
Hemos perdido cinco puestos en la clasificación por provincias desde 1980. Entonces éramos la vigésimo quinta provincia; en 1994 fuimos la vigésimo sexta; y en el 2007 descendimos hasta el puesto 30. Y esto ha ocurrido porque el crecimiento de nuestro IDH desde 1980 ha sido uno de los más bajos de España, especialmente desde 1994. Entre 1980 y 1994 crecimos ligeramente por encima de la media nacional; de 1994 al 2007, en el período de mayor expansión económica de nuestro país, lo hemos hecho notablemente por debajo.
El IDH es uno más de los métodos de consideración del desarrollo de la sociedad. Hay otros. Pero es un instrumento aceptado de forma general para aproximarse a la realidad social y a la proyección de desarrollo en un mundo tan tremendamente competitivo como el que vivimos. Por ello, haríamos mal en subestimarlo.
He insistido en diversas ocasiones en que hemos de atender a los datos que reflejan la realidad de nuestra provincia. En que es ya la hora de dejar a un lado lo que creemos que somos para prestar atención a lo que realmente somos. En que nos apliquemos en identificar nuestros problemas reales y dejemos a un lado nuestras ensoñaciones.
Miren, en el 2006 la provincia de Castellón era la cuarta provincia con mayor fracaso escolar de toda España (en el 2002 ocupaba el puesto número 12). En julio del 2010 ocupábamos el puesto 46 de 52 (todas las provincias más Ceuta y Melilla) en la pensión media de jubilación. Desde el 2008 somos la provincia que hemos incrementado en mayor medida, proporcionalmente, el desempleo.
Algunos quieren encontrar en el victimismo la explicación a esa situación. Siempre focalizan la responsabilidad de cuanto nos ocurre en otros: que si no nos hacen esto o que si nos hacen lo otro en contra de nuestros intereses. Y así, en un discurso interminable, cansino, pretenden diluir su falta de liderazgo para impulsar el cambio que, inevitablemente, necesita nuestra sociedad
Castellón de la Plana. En: Atlas geográfico ibero-americano. España. Barcelona : Alberto Martín, [1903]. Biblioteca Virtual del Patrimonio Bibliográfico, vía Europeana. Documento de dominio público. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario