Magdalena

Emitido en el programa Castellón en la onda de Onda Cero Castellón el 15 de marzo de 2011.

Buenos días Lorena:

Quedan días, horas ya para que la gente de Castellón vivamos nuestras fiestas. La Magdalena, un año más, como cada tercer domingo de Cuaresma, nos llama a vivir la fraternidad festiva de un pueblo comprometido con su identidad, con su historia y con su voluntad de proyectos compartidos.

Y este año, por primera vez, seremos fiesta de interés internacional. El Gobierno quiso sumarse a nuestra fiesta declarándola así, fiesta internacional. Presentándola ante el mundo como uno de los atractivos turísticos de España. Confiando en nuestra capacidad de generar entusiasmo y de provocar emoción e ilusión. Tenemos, pues, la obligación de asumir ese reto. A partir del próximo sábado, más que nunca, vamos a ser mirados, escuchados, considerados. Nunca como este año, nuestra fiesta, nuestra ensoñación colectiva, va a ser más mirada, más soñada. Sepamos vivirla y hacerla vivir como merece.

El ruido ensordecedor de los petardos y el olor revitalizador de las tracas que nos acompañarán durante los próximos días han de hacernos más cómplices. Han de darnos más convicción para trabajar juntos por Castellón. Porque es la unidad en el esfuerzo, la unidad en el empeño y la unidad en el diseño de un futuro común lo que nos hará más fuertes. Lo sabe la gente de las gayatas y de las collas, los hosteleros y los pirotécnicos, los animadores y los restauradores de nuestra ciudad que han trabajado durante todo el año para hacer vibrar nuestro sentimiento magdalenero durante estos días. El sábado, a las 12 del mediodía, la mascletà nos hará más pueblo. Y nos abrirá de nuevo las calles, nuestras calles, para que las disfrutemos cívicamente, con la intensidad de la emoción que nos une.

Será la primera Magdalena internacional. Por ello, además de gozarla como sabemos, lo haremos pensando en quien ha de venir, en quien ha de elegirnos para compartir su tiempo de alegría entre nosotros.

A todas y a todos, buena suerte y que disfruten de la semana magdalenera. Salud, Lorena.