Esta semana he tenido la oportunidad de visitar el Centro Europeo de Empresas e Innovación (CEEI) de Castellón. En compañía de su presidente, Diego Basco, y del director del centro, Justo Vellón, pude comprobar el trabajo que allí están realizando una veintena de empresas emergentes que han encontrado en el CEEI castellonense una oportunidad para poner en marcha su vocación emprendedora y madurar sus proyectos aprovechando las sinergias económicas, organizativas y de conocimiento que genera un vivero de empresas.
El recorrido futuro de estas iniciativas dependerá de múltiples factores. Puede que alguna de ellas no encuentre el espacio que precisa en el sistema productivo global. Pero, sin duda, cuantas más facilidades demos a quienes apuestan por el dinamismo de la innovación y el valor del talento en sus ideas de negocio, más fuertes seremos como sociedad. Por eso creo también de gran interés la iniciativa del Ayuntamiento de Castellón, con la financiación del Gobierno de España, de crear un centro de promoción empresarial en la Ciudad del Transporte que dará opciones de desarrollo a un buen número de proyectos innovadores.
Como se está haciendo, asímismo, desde el Espaitec de la Universitat Jaume I. El parque científico-tecnológico y empresarial de la UJI, dirigido por Paco Negre y Juan Antonio Bertolín, tiene voluntad de liderazgo en la integración del conocimiento universitario con el emprendedurismo empresarial de nuestra tierra. Tanto desde su incubadora de empresas como desde los distintos servicios de orientación y apoyo, Espaitec (nacido del compromiso de nuestra universidad y de la Confederación de Empresarios de Castellón) ha de convertirse en una eficaz palanca para abrir nuevos espacios de progreso y riqueza en nuestra sociedad.
Porque no hay atajos para llegar al futuro con solidez. Hemos de ser capaces de que ninguna idea se pierda antes de ser evaluada y contrastada. Hemos de estar vigilantes para que ni una sola propuesta de generación de riqueza naufrague sin haber tenido siquiera la oportunidad de demostrar su viabilidad. Y para ello hemos de perseverar en el fomento del emprendedurismo y en el impulso de la creatividad y del talento. Y generar las condiciones culturales e institucionales propicias para que nuestros emprendedores se sientan incentivados a mantener la continuidad de su esfuerzo.
Esa ha de ser nuestra gran apuesta de futuro: no perder ni un átomo de talento. El tiempo nuevo en el que estamos entrando nos va a exigir imaginación, mucha imaginación, y esfuerzo, mucho esfuerzo. Para ser competitivos en el mundo multipolar que amanece tendremos que profundizar en nuestras fortalezas y ampliar nuestros espacios de creatividad. Como están haciendo, entre otras muchas, nuestras empresas vinateras, recogiendo la herencia ancestral de la vid en Les Useres, en Vilafamés o en las tierras del Palancia y recreándola, reformulándola. En los últimos años los vinos de Castellón han dado un salto adelante decisivo, basado en la calidad de un producto mimado en la tierra y trabajado con nuevas técnicas de producción y tecnología de última generación. El compromiso esforzado de nuestros viticultores y bodegueros les está abriendo nuevos mercados dentro y fuera de España.
Un estudio reciente del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial del Ministerio de Ciencia y Tecnología sobre el impacto de la I+D+i en el sector productivo español nos informa de que las empresas que invierten en innovación aumentan en un 16 por cien su productividad y en un 18 por cien el valor de sus exportaciones. Este tipo de empresas, dice el estudio, generan más y mejor empleo. Por ello la Estrategia Estatal de Innovación del Gobierno de España ha movilizado durante 2010 más de 6.700 millones de euros en ayudas a empresas innovadoras para facilitar su modernización y fomentar la internacionalización de su actividad.
Los emprendedores y las emprendedoras de Castellón constituyen lo mejor de nuestro capital humano. Son la punta de lanza en la construcción de nuestro futuro. Por ello, nuestro reconocimiento y apoyo, el de toda la sociedad, es una exigencia colectiva.
Los emprendedores y las emprendedoras de Castellón constituyen lo mejor de nuestro capital humano. Son la punta de lanza en la construcción de nuestro futuro. Por ello, nuestro reconocimiento y apoyo, el de toda la sociedad, es una exigencia colectiva.
Hola, para los que os interese saber mejor cómo está estructurada la e2i (Estrategia Estatal de Innovación), os recomiendo este enlace http://e2i.es/?p=125 en el que se explican los 5 ejes principales de actuación. Está ideada como una solución integral para incidir en todos los aspectos importantes de la innovación y la economía. Esperemos que funcione! Por cierto, el texto de la e2i se encuentra en la página del MICINN. Un saludo
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