Industria para el futuro

Publicado en Mediterráneo el 19 de marzo de 2011.

En los últimos tres años, desde 2009, el Gobierno de España ha puesto a disposición de la industria de Castellón casi 92 millones de euros. Más de 15.300 millones de las antiguas pesetas destinados a favorecer la competitividad de nuestras empresas industriales y a regenerar el tejido productivo de nuestras comarcas. Un esfuerzo muy importante en un tiempo de dificultad como el que vivimos.

119 empresas y 10 entidades públicas y privadas castellonenses han accedido a estas ayudas y subvenciones. Empresas de Onda, Vinaròs, Castellón de la Plana, l'Alcora, Vila-real, Benicarló y otros 16 municipios de nuestra provincia han visto cómo sus proyectos de mejora competitiva y de incremento de la productividad se beneficiaban de las políticas de apoyo a los sectores industriales impulsadas por el Gobierno.

Las propuestas de nuestros emprendedores que han sido avaladas por las ayudas del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio incorporan sectores clave de nuestra actividad productiva. Por supuesto, la industria azulejera, que en ese contexto ha conseguido casi 60 millones de euros en ayudas directas en estos tres años para optimizar sus procesos productivos, mejorar su eficiencia energética, modernizar su equipamiento tecnológico e incrementar su presencia internacional. Y junto a la cerámica, las industrias agroalimentaria, química o del mueble, entre otras.

Un compromiso decidido con la industria que parte de la convicción del Ejecutivo de Rodríguez Zapatero de hacer de este sector un eficaz motor de crecimiento y de creación de empleo en el proceso de cambios profundos que exige la renovación de nuestro modelo de desarrollo. Para ello, en el marco de la Estrategia de Economía Sostenible, el Gobierno aprobó recientemente el Plan Integral de política industrial 2020 que establece cinco ejes de actuación: mejorar la competitividad de la industria española en un entorno mundial que ha visto emerger nuevos actores industriales de última generación; fomentar la innovación como valor fundamental en nuestros procesos productivos; favorecer el dinamismo y el crecimiento de nuestras pequeñas y medianas empresas; impulsar la internacionalización, mejorando el posicionamiento empresarial español en el mercado mundial; y reforzar los sectores industriales estratégicos, aquellos de alta cualificación, productividad e intensidad tecnológica y con gran capacidad de arrastre sobre el resto de sectores, entre los que el Gobierno ha considerado a nuestra industria cerámica. Estamos hablando de una estrategia global que coordinará las políticas de diez ministerios para preservar la capacidad industrial de España y fomentar la mejora de su competitividad. Una gran apuesta nacional que, sin duda, beneficiará a la industria castellonense.

Por ello el Gobierno va a seguir apostando por el talento industrial de nuestra provincia. Con esas ayudas directas, comentadas más arriba, y con otras muchas acciones destinadas a crear y aplicar el conocimiento y a dinamizar el potencial innovador de nuestro entorno productivo. En esa línea, el apoyo financiero e institucional al parque científico-tecnológico y empresarial de la Universitat Jaume I constituye un ejemplo claro de confianza en la capacidad de nuestro principal centro de generación de conocimiento para transferir al mundo empresarial su reputado caudal de propuestas innovadoras.

La industria de Castellón exige y merece del esfuerzo de todas las administraciones públicas para favorecer la actividad de sus protagonistas: nuestros empresarios y nuestros trabajadores. Son ellos quienes han hecho y seguirán haciendo a los sectores industriales de esta provincia motores de futuro. Para afrontar lo que Justo Nieto llama, en una reciente y muy interesante conferencia dictada en Vila-real, la “nueva normalidad”. Esto es, el nuevo tiempo que estamos comenzando a vivir.