31 julio 2014

Gaza, ¿por qué no gritas?

¿Por qué no gritas cuando lees que niños y niñas gazatíes encuentran la muerte en un colegio de las Naciones Unidas bajo los morteros del gobierno israelí? ¿Por qué no te estremeces cuando ves que madres de Rafah o de Yamalia claman por no poder defender a sus hijos de las bombas de Netanyahu? ¿Por qué no te horrorizas cuando ves que los hospitales abarrotados de Jan Yunis son objetivo de los obuses del ejército de Tel Aviv? ¿Por qué no te conmueves cuando sabes que abuelos de Gaza lloran los cuerpos despedazados de sus nietos? ¿Por qué no te aterras al imaginar el estado de terror permanente en que vive el millón y medio de palestinos que habitan la Franja? ¿Por qué te callas cuando escuchas que al otro lado de nuestro mar los niños y las niñas no pueden jugar, no pueden dormir, no pueden soñar por el mero hecho de ser hijos de su país? Gritos, estremecimiento, horror, conmoción, terror, silencios. Muerte, humillación, indignidad, vileza, opresión. El 90 por ciento de la ciudadanía judía de Israel apoya a su gobierno en esta nueva masacre de Gaza. La comunidad internacional ha sido otra vez incapaz, casi 1.400 muertos después, de imponer una sola sanción al gobierno y al Estado que están provocando la matanza.


30 julio 2014

En manos de quién estamos: Rajoy, Mas y los Pujol Ferrusola

Tal vez el cataclismo Pujol no haya cogido por sorpresa a Artur Mas, crecido personal y políticamente al amparo del patriarca. Tal vez las continuadas idas y venidas de los Pujol Ferrusola a los juzgados y alguna que otra información que a buen seguro obrará en su poder hicieran temer al president catalán que las cosas ocurrieran como han ocurrido. Lo que es incuestionable es que el terremoto político y social provocado por las andanzas pestilentes del otrora todopoderoso clan ponen a Mas en una muy difícil situación para seguir liderando la deriva independentista de parte de la sociedad catalana. Hoy, es claro, llega el Molt Honorable a la tan esperada entrevista con Rajoy en La Moncloa tremendamente debilitado bajo la oscuridad de la sombra proyectada por la gran familia. Pero se equivocaría gravemente el presidente del Gobierno si pretendiera dar continuidad a su inmovilismo en relación con la crisis catalana a la vista de la debilidad de su interlocutor. Esta no es una cuestión sólo de legalidad; es un asunto que atañe a los sentimientos, a la voluntad, a la percepción que tienen muchos catalanes respecto de su relación con el resto de España. Porque la crisis catalana es la crisis del Estado y no se resolverá esperando a que escampe o jugando al tacticismo de corto vuelo. Es imperativo buscar y encontrar salidas que no pueden taponarse desde el fetichismo constitucional ni el empecinamiento rupturista. La España federal espera su oportunidad para romper los muros que unos y otros se han empeñado en levantar.


28 julio 2014

39 Congreso del PSOE: la izquierda imprescindible

Pasado ya el 39 congreso federal del PSOE, que ha alumbrado una nueva dirección liderada por Pedro Sánchez, se abre una etapa decisiva para el socialismo democrático en España. Un período que va a poner de manifiesto si el más importante partido de la historia política de este país es capaz de reencontrarse con la ciudadanía demócrata y progresista española para crear la mayoría electoral necesaria que aborde los cambios profundos que precisamos. Cuatro ejes trazó ayer el propio Sánchez para ello. Emprender la transición económica pendiente hacia una economía de la igualdad, creativa, redistributiva y sostenible, capaz mediante una intensa reforma fiscal de hacer viable el Estado del bienestar. Transformar la estructura institucional creada en 1978 en un Estado federal a partir de una amplia reforma constitucional que permita a generaciones de ciudadanas y ciudadanos refrendar un nuevo pacto de convivencia. Garantizar la igualdad efectiva entre géneros, clases y territorios, favoreciendo a quienes más lo necesiten con políticas de igualación. Y regenerar la vida pública desde el radicalismo democrático, haciendo transparentes los poderes político y económico para su control real por la ciudadanía, fomentando la participación e impulsando un nuevo código y nuevos comportamientos éticos en el espacio público. Es en este último ámbito en el que Ximo Puig, secretario general del PSPV y nuevo secretario de regeneración democrática del PSOE, aportará el intenso trabajo hecho por los socialistas valencianos en la definición de las políticas de reactivación de la democracia. Este es el marco en el que se va a mover el socialismo democrático español. Un proyecto de transformación radical anclado en el futuro a partir de los valores del socialismo de siempre: la pasión por la igualdad y la libertad de todos y de todas. Un proyecto imprescindible para la izquierda, para el País Valenciano y para España.


27 julio 2014

La necesaria revolución energética

He leído en algún medio digital que existe preocupación entre las grandes empresas energéticas por las ideas de Pedro Sánchez sobre la necesaria desoligopolización del sector en España, su apuesta por impulsar el autoconsumo eléctrico de hogares y empresas y la potenciación de las renovables. He escrito yo varias veces aquí sobre esos aspectos que me parecen cruciales para nuestro futuro político y económico. El oligopolio que mantienen de facto las cinco grandes compañías energéticas españolas es un factor altamente distorsionador de la calidad democrática de nuestro sistema. Su influencia sobre la vida institucional, sobre el reconocimiento de los derechos de consumidores y usuarios y sobre la democratización del acceso a la energía, que deriva en el alto porcentaje de pobre energéticos en nuestra sociedad, exige de medidas audaces, irrenunciables desde una opción realmente progresista. Determinante en esa estrategia ha de ser propiciar la producción distribuida, descentralizada de energía, en un territorio como el español con unas condiciones naturales privilegiadas para ello. Hacer de cada edificio, empresarial o residencial, una central de producción y aprovechamiento energético; favorecer que los excedentes de consumo viertan a la red general aportando beneficios al pequeño productor; repensar el sistema energético, en definitiva, con las claves de internet, convirtiendo a cada usuario en contribuyente activo al sostenimiento de los beneficios de todos. No es una ensoñación naif, como algunos se apresuran en descalificar; es una reforma necesaria, revolucionaria que redundaría en la eficiencia energética del sistema en su globalidad, en el empoderamiento de los ciudadanos-consumidores, en la creación de empleos cualificados de nueva generación y en la transformación de las estructuras de poder en nuestro país. Una oportunidad para recobrar el aliento.


24 julio 2014

"¡Qué hijo de puta!", Carlos Fabra dixit

Corría el verano de 2008 cuando los micrófonos del salón de plenos de la Diputación de Castelló registraban aquel "¡qué hijo de puta!" dedicado por el entonces presidente de la institución y jefe provincial del movimiento gaviota Carlos Fabra al líder socialista Francesc Colomer. Recién había concluído la última sesión plenaria, tensa y bronca como gustaba al padrino fabrista. La bancada popular había estado a la altura que de ella se esperaba: carcajadas de aliento y aprobación a cada una de las exhibiciones de chulería y prepotencia del capo contra la oposición socialista. Nada de particular. Era lo habitual en aquella casa, ocupada durante lustros por Fabra y su familia política como si de su oficina de negocios y colocación se tratara. Años de poder absoluto y arbitrario, de favores y de persecuciones, de política malsana y ruin. Años de silencios cóplices, de adhesiones inquebrantables por muchos y muchas que hoy callan. Y de colaboraciones necesarias, tantas y tan entregadas a la causa desde los más variopintos espacios de una sociedad anclada en el tiempo político de los caciques decimonónicos. Hoy el jefe ya no ejerce, condenado y recondenado por delitos contra la ciudadanía y el Estado. Pero muchos de los que aquella tarde de julio de 2008, como tantas otras, aclamaban los alardes autocráticos del maestro siguen hoy bien viviendo del erario público. Algunos, aún, en el mismo banco de gobierno desde el que entonces insultaban a Colomer y sus compañeros y compañeras de oposición. Todavía queda mucho por hacer.

PD: voces libres y valientes como las de Miguel Ángel Campos y María Fabra, desde la Cadena Ser y El País, han sido imprescindibles para el comienzo del fin del fabrismo. Gracias por siempre, queridos.


22 julio 2014

Las facturas escondidas de Fabra y los suyos

1995-2014. Ese es el tiempo que lleva gobernando el PP la Comunitat Valenciana. De esos 19 años, 15 con mayorías absolutas incontestables. Zaplana, Olivas, Camps y Fabra se han sucedido en el Palau de la Generalitat a lo largo de estos años, concentrando todo el poder político e institucional valenciano. Sin concesión alguna, sin compartir espacios de poder con nadie. De forma exclusiva y excluyente. Eran ellos los que dijeron habernos convertido en el "eje de la prosperidad española"; fueron ellos los que decían haber hecho de este país la "locomotora de Europa". Ahora, cuando la Comisión Europea dice sentirse engañada por la ocultación de la deuda pública valenciana en forma de facturas multimillonarias metidas en los cajones del olvido (circunstancia denunciada durante años desde el PSPV y el resto de la oposición), dice Fabra que la culpa es del PSOE y, especialmente, de Zapatero. Pero... ¿de qué pasta está hecha esta gente? Las facturas son suyas. Los cajones son suyos. Las decisiones para ocultarlas fueron suyas. Las negativas a dar explicaciones en Les Corts cuando se preguntaba por ellas fueron suyas. Y la responsabilidad de esto, y de tantos episodios vergonzantes más, es única y exclusivamente de ellos. Siguen sin pedir perdón y no lo van a hacer por nada ni ante nadie. La cara de cemento armado... ¿y las tripas? ¿De qué narices tienen hechas las tripas?


12 julio 2014

Sentimiento por Palestina

Uno no puede sentirse bien sabiendo que a esta hora miles de niños y de niñas palestinos en Gaza escuchan el ruido atronador de las explosiones de los misiles de Netanyahu junto a sus casas. Uno no puede sentirse bien imaginando el terror en la mirada de sus padres esperando a que el próximo obús caiga lo más lejos posible de su vivienda. Uno no puede sentirse bien pensando en el dolor infinito de las abuelas y los abuelos de la Franja, perdedores de mil batallas, conocedores de la brutalidad del ejército israelí en sus campañas de represalia y venganza. Uno no puede sentirse bien escuchando, otra vez, otra vez más, los partes de bajas civiles, niños, padres, abuelos palestinos, ejecutados vilmente víctimas del odio. Uno no puede sentirse bien no haciendo nada tras tantos años de indignidad, de salvaje indecencia. Sí, sé que esta, como cualquiera, no es una historia de buenos y malos, pero no puedo aceptar la equidistancia cuando un pueblo es colectivamente masacrado, humillado, condenado a renunciar a su felicidad durante décadas. Ahora, en algún lugar de Gaza, seguro que hay un grupo de chavales chapoteando en la orilla del mar, de nuestro mar, jugando con el agua, la misma agua en la que se bañarán esta mañana nuestros hijos. Niños y niñas a los que une el mar y separa la vida. No, no puedo sentirme bien, lo lamento.


10 julio 2014

La soberbia del fabrismo

Resulta que el Tribunal Supremo ha declarado ilegales las obras que en su momento hiciera la Generalitat Valenciana, con la colaboración necesaria del Ayuntamiento de Castelló de la Plana, en el parque de Ribalta para el paso del trolebús. Esta es la enésima sentencia judicial contra las actuaciones urbanísticas del gobierno popularista de la capital de La Plana. Un gobierno que vió hace unos meses cómo la Justicia anulaba en firme su plan general de ordenación urbana. Y que ve ahora cómo, otra vez en los tribunales, se ratifica la ilegalidad de sus actuaciones en relación con el principal proyecto público de la ciudad. En ambos casos, PGOU y TRAM, ha sido la soberbia, la voluntad de negar la voz a las organizaciones ciudadanas al amparo de la mayoría absoluta del fabrismo local y el desprecio por la legalidad lo que ha llevado al ayuntamiento castellonense al colapso. Y todo ello, lo ahora juzgado y condenado, ocurrió siendo alcalde el hoy president Fabra y siendo su segundo el actual presidente de la Diputación y jefe provincial del popularismo Javier Moliner. No quisieron escuchar las voces que alertaban de las ilegalidades que amparaban, simple y llanamente porque creyeron desde esa soberbia que la ley no era razón para ellos. Y llevaron al consistorio capitalino al naufragio que ahora todos sufrimos. Aún ayer, el portavoz fabrista en el ayuntamiento, cegado por la displicencia que genéticamente los iguala, acusaba al grupo socialista y a su líder, Amparo Marco, de paralizar el desarrollo de la ciudad por llevar ante los jueces sus despropósitos. Grotesco. Castelló de la Plana naufraga bajo el manto de las arbitrariedades, incapacidades y deslealtades que el fabrismo, el de Alberto y el del otro, ha tejido durante los últimos 23 años. A la ciudadanía corresponde decidir si han de seguir siendo los tribunales quienes los pongan en su sitio o ha de ser el voto. Pura cuestión de dignidad.


09 julio 2014

El cabreo del empresariado valenciano

Tras lustros de andar juntos y revueltos, la comunidad de intereses que cimentó la alianza entre el empresariado valenciano y el poder político popularista muestra signos de agotamiento. Ayer toda la cúpula empresarial valenciana salió en tromba contra el ninguneo de Rajoy y Montoro hacia la Comunitat. Y, de paso, contra la campaña para reavivar el anticatalanismo en esta tierra puesta en marcha por Alberto Fabra. No es la primera vez que los dirigentes empresariales levantan la voz contra el Gobierno de España por lo que consideran discriminación inversora hacia el País Valenciano. Lo hicieron sistemáticamente en la época de Zapatero, cuando los presupuestos generales del Estado destinaron más inversiones que nunca a la Comunitat, pero lo hacían entonces cacofónicamente liderados por Francisco Camps y contra un gobierno socialista al que se atribuían todos los males. Ahora, constatada la renuncia de Rajoy a afrontar un nuevo marco de financiación para la Generalitat y contabilizada la dramática reducción de las inversiones estatales en infraestructuras vitales para el desarrollo valenciano, alzan la voz poniendo también en cuestión la forma de hacer las cosas desde el Consell. El deterioro galopante de la reputación y la imagen de la Comunitat, envilecida por tantos y tantos desmanes (a los que no han sido ajenos algunos de quienes ahora gritan tras años de silencio cómplice), y la quiebra de facto de nuestra Hacienda pública sumida en el marasmo de la incompetencia más absoluta comienza a resquebrajar el pacto de hierro sellado en tiempos de Zaplana. Ni siquiera el espantajo anticatalanista, un clásico de la agitación política del populismo valenciano recuperado por Fabra, es secundado ahora por quienes recordaron ayer que Cataluña es nuestro principal cliente. No es un divorcio, lo sé, pero sí una crisis profunda en este matrimonio durante tanto tiempo tan bien avenido.


07 julio 2014

#debatePSOE

Hoy los tres candidatos a la secretaría general del PSOE han avanzado un trecho más en el camino de la apertura de nuevos espacios para la política de progreso en nuestro país. Por primera vez un debate abierto y público en España para acceder a la dirección de un partido político. Han hablado, han compartido, han discrepado... pero sobretodo han construido épica socialista, reconocimiento del valor del socialismo democrático para afrontar con determinación los retos, muchos, que tiene la izquierda y la sociedad española. Gracias por permitirnos reconocernos en este PSOE y por dejarnos imaginar un nuevo impulso socialista para abrir nuevas avenidas por las que transitar la dignidad.



06 julio 2014

Alberto Fabra y el Club de la Comedia

Aprovechó esta semana Alberto Fabra su paso por la factoría de ideas del Tea Party aznariano, la pomposa FAES, para decir que el PP valenciano es la última esperanza... no de la Comunitat Valenciana, no. No de las Españas, no. ¡De Europa! Sí, sí, de Europa dijo el gaviota alfa valenciano. Hasta tal punto enturbia la mente la presencia de Aznar entre los suyos que Fabra se creyó Adenauer y perdió el escaso sentido de la realidad que se le supone. Que dijo del PSPV que es un nido de independentistas. vendido al oro pancatalanista dejó entender. Y que un gobierno de izquierda en la Generalitat convertiría el País Valenciano en algo así como la Corea del Norte del Marenostrum (no lo dijo así pero quiso que así se viera). ¡Menos mal que está él para salvar a la Comunitat, a España y a Europa de tanta maldad! ¡Menos mal que él, Cotino, Castedo, Camps, Rita y Serafín están aquí para que esta tierra de la prosperidad sin límite y de la felicidad sin fin nunca deje de serlo! El Club de la Comedia en estado puro... aunque en lugar de para reír para llorar.


03 julio 2014

El socialismo valenciano y la reforma constitucional

El PSPV viene reclamando desde hace ya un tiempo la necesidad ineludible de afrontar una profunda reforma de la Constitución para adecuar la realidad institucional a las aspiraciones y las necesidades de la mayor parte de la sociedad. Un acuerdo sin prejuicios que restablezca la ilusión colectiva por un proyecto compartido de reactivación democrática radical, abierto al futuro, participativo y transparente, que revierta el proceso de honda desafección ciudadana hacia la política. Un nuevo pacto que profundice en el autogobierno de los territorios que conforman España y establezca mecanismos de cooperación eficaz en un marco federal que garantice la suficiencia financiera de las administraciones que sostienen el Estado del bienestar. Una nueva alianza intergeneracional e interterritorial que blinde el Estado social y la igualdad de la ciudadanía frente a coyunturas desigualadoras y liquidacionistas. Porque vivimos en un tiempo y en una sociedad muy distintos a los de 1978, con actores nuevos y retos impensables hace casi 40 años. Porque el inmovilismo y el fetichismo de lo conocido frente a lo que está naciendo es apuesta segura hacia la quiebra social y el naufragio institucional. Y porque la Generalitat Valenciana, nuestro autogobierno, es literalmente inviable sin esos cambios imperativos. A reflexionar sobre todo esto vamos a dedicarnos los y las socialistas valencianos este fin de semana en Ontinyent. Para ello contaremos con la ayuda de intelectuales como Ángel Gabilondo, analistas como Ignacio Urquizu, Josep Torrent, Ximo Clemente o José A. Pérez, especialistas en Derecho Constitucional y federalismo como Gregorio Cámara, Artemi Rallo, Josep Maria Vidal, Joan Rangel o Meritxell Batet o sindicalistas como Carmen López. Un ejercicio abierto a la ciudadanía para debatir sobre un asunto crucial que no puede ni debe esperar.


02 julio 2014

La RTVE que no quiere la derecha

Acostumbrados como nos tienen los emplasmados a hablar de la herencia recibida de Rodríguez Zapatero (tiempo habrá en este país, espero, de poner negro sobre blanco qué heredaron y qué van a dejar en herencia los rajonianos) resulta interesante constatar lo esquivos que son respecto de la radiotelevisión pública. En 2011 RTVE era referencia de pluralidad y calidad informativa en este país. Unos informativos líderes en solvencia, credibilidad y seguimiento ciudadano, crecidos en un nuevo modelo de gestión pública que permitió superar el gubernamentalismo instalado durante décadas. Sólo con recordar qué eran entonces los telediarios de Lluís Motes en Canal 9 y de Pepa Bueno en TVE identificamos con claridad palmaria dos formas radicalmente distintas de entender el papel de los medios públicos de comunicación. Y dos maneras irreconciliables de interpretar la política y la acción de gobierno. Aquella RTVE, la de 2011, era el fruto de la decisión política del Gobierno de Zapatero de renunciar al poder partidario de la televisión en beneficio de la calidad democrática de la sociedad. Como era aquella RTVV la consecuencia de la voluntad antidemocrática de los gobiernos derechistas valencianos. Hoy la primavera radiotelevisiva auspiciada por el último gobierno socialista (pasto, no olvidemos, de un implacable acoso desde el conglomerado mediático empresarial) ha dejado paso a una corporación mediatizada de nuevo desde La Moncloa y Génova y abandonada por la audiencia. Un altavoz más de la propaganda impuesta desde el poder absoluto popularista. Ahora, ya sabéis el estribillo: descrédito, desafección, implosión y liquidación. Eso es lo que espera a la que fuera la televisión de todos, convertida en terminal mediática de unos pocos. Los valencianos y las valencianas lo sabemos muy, pero que muy bien.


01 julio 2014

Corruptos en su salsa

Hace ya más de un año el PSPV hizo público un importante conjunto de propuestas para luchar eficazmente contra la corrupción política y dar transparencia a la gestión pública. Un programa de reactivación democrática frente al descrédito lacerante de la política al que nos han conducido dos décadas de indecencia. Entonces las gaviotas salieron de sus nidos para decir que el documento encargado por Ximo Puig era la nada comparado con lo que ellos venían haciendo e iban a hacer todavía más contra la corrupción. Que al fabrismo nadie le gana en transparencia; que nadie como Fabra para echar a los mercaderes del templo. De esto hace ya mucho, mucho tiempo. Y los gases pestilentes de tantos años de putrefacción afloran a borbotones por todo el territorio valenciano. Las conversaciones telefónicas entre el empresario alicantino Ortiz, su amiga y alcaldesa fabrista Castedo, el sobrino de Cotino... ponen los pelos de punta... como lo hicieron hace ya un tiempo las que mantenían Camps o Costa con el Bigotes... o muchísimo antes Zaplana y Palop. Da asco. Da asco saber en qué ha convertido la vida pública valenciana este sindicato de aprovechados. Ahora, cuando las gaviotas ya sólo sobrevuelan lodos fétidos incapaces de encontrar algo a salvo de la podredumbre, ahora va Alberto F. y hace como si empujara a Cotino a salir de Les corts; o hace comentarios crípticos sobre si Castedo debería seguir o no al frente del ayuntamiento de Alicante. Hace años y años que se denuncia desde el PSPV y las otras izquierdas el grado de demencia cleptómana al que habían llegado todos ellos. Fabra va a cumplir tres años al frente de la Generalitat y nada de cuanto olía a podrido ha dejado de hacerlo. No puede amputar ni cegar la hemorragia. Muchos años sabiendo de todo esto como para ahora ir de don Limpio. Imposible.

Frederik Ruysch. Alle de ontleed- genees- en heelkindige werken... Amsterdam, 1744. U.S. National Library of Medicine. Documento en el dominio público.