Hace casi diez años los diputados y las diputadas de la derecha en el Congreso celebraron con gritos y aplausos la aprobación de la participación española en la invasión de Irak. Un júbilo necrófilo, un jolgorio indecente que rubricaba el delirio megalómano de un gobierno que tenía a Mariano Rajoy como vicepresidente. Ahora, otra vez, el Grupo Popular del Congreso celebró con algarabía el anuncio por Rajoy de nuevos y decisivos pasos en la demolición del estado de bienestar español. Diez años no es nada para los liquidadores: entonces celebraban la guerra, ahora celebran la ruina del pueblo. "Que se jodan!" gritaba la diputada castellonense Andrea Fabra desde su escaño. ¿Que se joda quién? ¿Que se joda el pueblo? ¿Que se jodan los parados? ¿A quién quiere joder la derecha? Ya está bien. Ya basta. Rajoy y los suyos han decidido que esta es la gran batalla, la batalla final. Que es el tiempo de acelerar la liquidación. Por eso los gritos y las risas, por eso el "que se jodan". No, no podemos permitírselo.
El blog de Toni Lorenzo. Algunas consideraciones sobre el mundo en que vivimos: cómo analizarlo, cómo representarlo, cómo vivirlo y cómo transformarlo.
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ResponderEliminarLo del propósito de enmienda no es precisamente algo del que hagan uso, para qué, no son conscientes de que tengan que corregirse en nada, por qué, al fin y al cabo ellos son los elegidos por el Altísimo para realizar su obra aquí, entre los desesperados humanos. No hay peor ceguera que el fanatismo y el desprecio hacia los demás y más cuando éstos son más débiles que uno. Esperemos que San PPablo (Saulo, Apóstol de los gentiles) se vuelva a caer del burro para darse cuenta de la cruda realidad en la que malviven los humildes hijos de Dios.
ResponderEliminares que, qué bonito, lo último que nos faltaba oír...Un saludo para el blog.
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