El Gobierno de Rajoy vuelve a torpedear las políticas de ahorro farmacéutico de la Junta de Andalucía. El ministerio de Ana Mato, como hiciera hace ya unos meses, va a recurrir la segunda subasta a la que convoca el Ejecutivo andaluz a los laboratorios farmacéuticos que proveen de medicinas a su sistema público de salud. Una medida que genera más de 80 millones de euros de ahorro al erario público y que establece una nueva relación entre la Administración y los proveedores sanitarios, derivando las cargas de la reducción presupuestaria también a las empresas. Mato, la de los jaguares y los confetis, ya lo hizo en la primera subasta y vuelve de nuevo a la carga. Porque a los de Rajoy les importa un bledo la austeridad pública y la buena gestión; no están en eso. Su objetivo no es hacer viable el sistema de bienestar público. Es su liquidación por extenuación, por derribo, lo que persiguen. Ahora también sabemos que Cospedal va a poner en venta el monte público manchego o que la tan anunciada reforma de los ayuntamientos es una operación encubierta para poner en almoneda los servicios públicos municipales. Como en tantos otros ámbitos. Los ensobrados están embarcados en la creación de la nueva burbuja para convertir lo de todos en cosa de unos pocos. Es mentira que no haya alternativas y lo saben. Tan mentira como que no sabían de dónde venía el jaguar o que habían echado a Bárcenas del partido. Hoy Mariano comparece ante el Congreso en su primer debate del Estado de la nación, seguirá mintiendo. Todo esto lo llevamos diciendo muchos durante mucho tiempo. Que luego no se diga que mirábamos hacia otro lado.
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