Sin industria no hay futuro en el País Valenciano

#Fabraincapaz @ximopuig - Recuerdo el incesante graznido de las gaviotas allá por 2011 respecto del abandono de la Comunitat Valenciana por el Gobierno de España presidido por Rodríguez Zapatero. Y me vino ayer a la cabeza lo que decían respecto de la supuesta falta de apoyo a nuestra industria, consignas convenientemente amplificadas con la complicidad del brazo mediático del régimen. La Generalitat del PPCV, ya entonces quebrada tras años de expolio, carecía de recursos y de voluntad política para impulsar políticas industriales dignas de tal consideración, pero eso no les impedía vociferar contra la única administración que lo estaba haciendo. De nada servía que la industria castellonense, por ejemplo, recibiera en 2009-2011 casi 80 millones de euros en créditos del Gobierno para favorecer su modernización e internacionalización o que el sector cerámico fuera incluido entre los sectores industriales estratégicos para el futuro de España, clave que posibilitó el acceso a programas de ayudas importantes. Y es que aquel gobierno sabía que la apuesta por la industria durante la crisis, su capacitación para competir en un mercado globalizado y con escenarios cambiantes, era vital para nuestro porvenir. La llegada del liquidacionismo al Gobierno a finales de 2011 quebró esa trayectoria y el compromiso con la industria valenciana. Y los graznidos se acallaron para dar paso a la nada. Fabra asiste como convidado de piedra a la renuncia del Ejecutivo español a mantener medidas de ayuda a las empresas industriales de la Comunitat e impulsar una auténtica política industrial. Ayer, en el Congreso de los Diputados, de nuevo el PP bloqueó propuestas en ese sentido presentadas por el secretario general del PSPV, Ximo Puig Ferrer, 48 horas después de la renuncia de los fabristas a votar la reforma del Estatut que blindaba un mínimo inversor del Estado en el País Valenciano. Sin industria no hay futuro para nosotros. Y no parece que esa sea la prioridad del Consell que preside Alberto Fabra.