No merecemos que nos representen ante el mundo

#Madrid2020 - "Es un país con mucho atractivo, buen tiempo, gastronomía, muchas cosas que ver, gente simpática..." Mariano Rajoy ante la prensa internacional, el pasado viernes. No celebré lo ocurrido el sábado en Buenos Aires. No celebré ver a mi país humillado y maltratado de esa forma. No pude celebrar que el presidente de mi Gobierno, el que eligieron la mayoría de mis conciudadanos, confundiera el acto de defensa ante el mundo de la candidatura olímpica de Madrid con uno de sus bolos de fin de semana y pretendiera hacer creer a todos lo que sus hooligans vitorean en casa. No pude celebrar que la alcaldesa de Madrid se abrazara al esperpento para humillar indecentemente a millones de ciudadanos y ciudadanas que soñaban con una ilusión legítima y que asistieron indignados a la sinrazón de lo que veían. No pude celebrar que el ministro bravucón que durante meses ha agitado el fantasma de Gibraltar con el solo afán de ocultar las propias vergüenzas formara parte de la delegación que andaba pidiendo votos para Madrid. No pude celebrar que mientras muchos imaginaban un Madrid diferente Montoro lanzara al mundo la especie de que España estaba dando una nueva lección a todos por su capacidad para salir ya de la crisis. No pude celebrar el engaño masivo con que las empresas de comunicación, juramentadas a tal fin, crearon una realidad falsa que generó falsas expectativas entre miles y miles de ciudadanos y ciudadanas humildes ávidos de ilusiones que les ayuden a dibujar el futuro perdido. Ahora hablan de tongo, de traición, de compraventa de votos. No creo, razonablemente, que tuviéramos oportunidad frente a Tokio, pero en el caso de que hubiera habido juego sucio, ¿de verdad alguno de estos, precisamente de estos, se escandaliza de ello? Tal vez este país y su gente merecieran la ilusión perdida. Lo que seguro que no merecen es que este club de señoritos casposos, ensobrados y emplasmados, este carnaval de aprovechados sin fin nos represente ante el mundo.

Paula Lorenzo Chiva. Pintura. 2013